Hoy es uno de esos días en los que miro por la ventana y no estoy en Mikonos con su fachada blanca y su cielo azul.Todo está gris emborronado.
Cuando el tiempo esta así ejerce una influencia extraña en la gente,parece como si la engulliese y la dejara sin vida.
Ultimamente mi cabeza esta como el tiempo,revuelta.
Mi independencia es un monstruo que no para de salir pegando bocados al aire,como Elvis.
Pero también como él ,se achanta con una caricia por necesidad.
Espero un cambio ya,pero radical,que esto no puede poder conmigo.
Y que no es por falta de ganas es por circunstancias laborales.
Y es que dejo de ser yo si no puedo trabajar.Mi motivación se va al traste y con ella mis ganas de tirar para adelante.
Y encima con lo que me gusta Mayo.

Por Mel